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La tensión ha llegado a un punto de no retorno en uno de los boxes punteros de la categoría de Moto2. La relación entre el piloto valenciano Sergio García Dols y su equipo, el QJMOTOR - FRINSA - MSI, está prácticamente rota, y todo apunta a una separación inminente que podría materializarse incluso antes del próximo Gran Premio en Mugello. Tras un inicio de temporada 2025 para olvidar, marcado por las lesiones y una profunda crisis de resultados, el equipo ya está buscando activamente un sustituto para lo que resta de campeonato.
La noticia, que venía sonando con fuerza en el paddock, ha sido adelantada por SKY Sport y también por la periodista de DAZN, Amanda Gala, quien a través de sus redes sociales soltó el "Bombazo en Moto2", asegurando que "el equipo MSI Racing Team quiere bajar de la moto a Sergio García Dols en el próximo GP".
La situación es tan avanzada que, según la misma información, el equipo ya tiene programado un test privado esta misma semana en el Circuit de Barcelona-Catalunya con el que se postula como principal candidato a ocupar ese asiento: el también valenciano Álex Escrig.
Este desenlace supone un giro dramático de 180 grados respecto a la temporada 2024. El año pasado, García Dols fue uno de los grandes protagonistas del campeonato, logrando dos contundentes victorias en el Gran Premio de las Américas y en Francia, lo que le llevó a liderar la clasificación general en la primera mitad del año. Aunque finalmente terminó cuarto, su rendimiento le postulaba como uno de los grandes favoritos para luchar por el título en 2025. Sin embargo, este año todo se ha torcido.
La mala fortuna de Sergio comenzó en la pretemporada, con una caída en los últimos test que le provocó una fractura en la mano derecha. Tras una primera intervención quirúrgica el 21 de febrero, el piloto tuvo que volver a pasar por el quirófano un mes después al no haberse consolidado correctamente la fractura.
Este contratiempo le hizo perderse el inicio del campeonato, regresando a la acción en la cuarta cita, en Qatar, donde no pudo puntuar. Desde entonces, su casillero apenas ha sumado los tres puntos de un 13º puesto en Le Mans, con resultados muy discretos en Silverstone y Aragón.
Lo que hace aún más llamativa esta crisis es que García Dols cuenta este año con el mismo equipo técnico que en 2024 llevó a Ai Ogura a proclamarse campeón del mundo de la categoría. A pesar de los intentos por reconducir la situación, con reuniones entre piloto y equipo a principio de temporada para analizar las dificultades, no se han encontrado las soluciones necesarias para que el valenciano recupere la confianza y el rendimiento.
Con la relación con García en su punto final, el equipo MSI ya se mueve para cubrir su vacante. La opción prioritaria es Álex Escrig, actualmente bajo contrato con el equipo Forward hasta finales de 2026. Aunque el contrato de Escrig contempla una cláusula de penalización para liberarse de cara a la próxima temporada, MSI está intentando que Forward le permita ejecutarla de forma anticipada, una operación que no parece sencilla ni gratuita. Como alternativa, también ha sonado el nombre de Jaume Masiá, quien actualmente compite en el Mundial de Supersport.
Mientras se resuelve el puzzle para lo que resta de 2025, el equipo QJMOTOR - FRINSA - MSI ya tiene su mirada puesta en el futuro a largo plazo. Para la temporada 2026, la estructura parece tener confirmada su alineación de pilotos con la continuidad de Iván Ortolá y el ascenso desde Moto3 de Ángel Piqueras, actual piloto del equipo en la categoría pequeña.
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Esta planificación a futuro evidencia la urgencia del equipo por encontrar un piloto competitivo que ocupe el asiento de García durante los casi dos tercios de temporada que aún quedan por disputarse. El tiempo corre, y el "divorcio" en una de las estructuras más potentes de Moto2 parece inevitable.
