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La Sprint de Silverstone ha marcado un punto de inflexión en el campeonato. Álex Márquez no solo ganó con autoridad, sino que rompió la racha de seis victorias consecutivas de Marc en los sábados. Fue el hermano pequeño quien impuso el ritmo, quien supo cuándo atacar y cuándo gestionar, y quien salió del trazado británico con una victoria que vale más que 12 puntos. Porque ahora Álex está a solo 19 de Marc en la general, y con más confianza que nunca.
En un trazado con viento traicionero y asfalto fresco, Álex encontró el equilibrio. Salió fuerte, se mantuvo cerca de la cabeza y, cuando su hermano cometió un error, no dejó pasar la oportunidad. Tomó el liderato y no lo soltó. En las últimas vueltas, Marc intentó presionarlo, pero fue él quien acabó marcando el ritmo. Incluso después de una caída en el entrenamiento matinal, Álex resurgió con una solidez impecable en carrera.
La victoria en Silverstone no es solo una cuestión de puntos: es un mensaje. El del Gresini demostró que está listo para pelear de tú a tú con su hermano en cada circuito, al que solo separa 19 puntos. Y tras la carrera, explicó cómo se fraguó el triunfo, reconociendo la dureza del duelo y la importancia de haber sabido gestionar los momentos críticos.
"Dije que estaría muy igualado con Marc, y ya está, muy igualado hasta que quedaban dos vueltas, que he decidido relajarme un poco. Y también él seguramente iba más justo por detrás de mí con la goma delantera. De ahí he decidido un poco tirar la toalla, de alguna manera, o asegurar ese segundo puesto. Pero estábamos muy, muy igualados. Marc aquí, cuando se pone a rueda mía, en las dos curvas donde le cuesta más con el rebufo, pierde en una y media de la otra, sin poder replicarlo ni hacer lo mismo que yo. Entonces sabía que estaría encima de mí", empezó diciendo el dorsal #73.
En general se muestra "contento", creo que es la mejor manera de redimirme después del error, muy grave error que he hecho esta mañana, solo, con esa caída fea. Pero estoy contento de cómo ha ido".
Respecto a cómo logró recuperar la concentración después del susto en los entrenamientos, Álex fue claro: "Bien, sí. Creo que es determinación. Cuando tú tienes las cosas claras y tienes algo en mente, la determinación creo que es lo más importante. Ayer, también en el doblete del FP2 por la tarde, tuvimos un problema técnico. La primera moto no iba bien, tuve que entrar. Y cuando entré en el box, estaban todos un poquito nerviosos. Pero dije: ‘Hagamos las cosas bien, teníamos velocidad’. Y cuando tienes velocidad, también tienes esa tranquilidad de saber que vas a poder estar ahí, en el grupo de cabeza, o vas a poder hacer lo que hay que hacer".
El pequeño de los Márquez sabe que tiene velocidad: "Entonces, tener esa velocidad y esa seguridad encima de la moto, a pesar de los errores, hay que evitarlos porque te pueden costar lesiones o disgustos. Pero a pesar de eso, tener esa determinación y esa tranquilidad en esos momentos es clave. Y la tenemos".
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De cara a la carrera del domingo, el del Gresini lo tiene claro: "Mañana todo está de cara para hacer el doblete. Ese es el siguiente objetivo. Espero que también esté igualado, como nos decía hoy con respecto a Marc. Ahí podemos tener algo más. Un neumático más duro trasero. Marc tiene un extra, sobre todo aquí, que cae bastante. También habrá que ver, porque él maltrata un poquito más el tren delantero, y entonces la goma de delante también le puede caer. A nosotros no tanto. Ahí estará la carrera. A mí me caía un poquito más la tracción, a él un poquito más la delantera. Ahí estará la diferencia".