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Mucho tienen que cambiar las cosas para que Aleix Espargaró decida renovar su contrato con Aprilia. El catalán mantiene un acuerdo con la firma de Noale hasta el 31 de diciembre de 2024, y si hace caso a su intuición, el dorsal #41 cree que su carrera deportiva como piloto en activo finalizara a finales del próximo año, aunque no será un alto definitivo.
Aleix lleva compitiendo en el mundial a nivel profesional desde el año 2005, cuando completó su primera temporada en 125 cc. De 2010 en adelante, el de Granollers ha sido un fijo en la parrilla de MotoGP, categoría a la que accedió a través del Pramac Racing Team al manillar de una Desmosedici satélite, para correr después con la motos CRT, Open y finalmente lograr su primer contrato de fábrica con Suzuki, compitiendo para los de Hamamatsu en 2015 y 2016.
El español dio el salto a Aprilia en 2017, y desde entonces no se ha bajado de la RS-GP; su ambición y su esfuerzo constante han sido cruciales para el crecimiento del proyecto italiano en MotoGP, y aunque las cuatro primeras temporadas de Espargaró sobre la RS-GP fueran duras, algo cambió dentro de Aprilia a partir de 2021, precisamente el año en el que Aleix logró su primer podio con los italianos.
A partir de ahí, el piloto español encontró una gran conexión con el prototipo de Noale que le llevó a ser candidato al título de MotoGP en 2022, una temporada en la que firmó un cuarto puesto final tras haber cosechado un total de seis podios, uno de ellos, el de Argentina, contabilizado como victoria.
Ahora, con el 2023 ya en marcha, el dorsal #41 mira hacia su futuro más inmediato, consciente de que su vida deportiva está próxima a su final; a punto de cumplir 34 años, el catalán ha admitido en una entrevista ofrecida a The-Race.com que "ya no tiene muchas fuerzas para seguir pilotando muchos años más" y que, a diferencia del resto, no está preocupado por lo que pueda suceder con él durante los próximos meses.
Aleix dice "tener suerte" porque, a partir de este verano y principios de 2024, "todo el mundo empezará a preocuparse por su futuro, ¿y yo? No, nada de nada", y por sus palabras parece que Aprilia tendrá que insistirle mucho si quieren seguir contando con él un año más, es decir, de cara a 2025: "Si empiezo el año que viene y estoy luchando por el título, y si Aprilia quiere ofrecerme un año más, un contrato de un solo año, lo aceptaré. Si no soy rápido y me tengo que ir a casa, pues me iré a casa".
Espargaró lleva tiempo preparando su retirada; ha abierto tres restaurantes en el Principado de Andorra, su lugar de residencia, además de invertir en otros negocios, por eso no le preocupa dejar de percibir su sueldo de Aprilia. "Tengo muchos negocios en casa, he disfrutado mucho de los dos o tres últimos años de mi carrera, así que realmente no tengo estrés", admite.
Mojándose más sobre su futuro, el catalán afirma que "mi sensación es que 2024 será mi última temporada", y su continuidad en MotoGP pasa por "empezar el año que viene, estar arriba y que me ofrezcan un nuevo contrato", algo que después decidirá "con mi familia".
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Si bien el español todavía no sabe a ciencia cierta qué será de él en 2025, Aleix sí tiene clara una cosa, y es que "no parará al 100%", revelando que su deseo, una vez esté retirado, es trabajar con Aprilia en el desarrollo de la RS-GP: "Quiero seguir como piloto de pruebas, porque disfruto mucho probando cosas con la fábrica. Y ahora, con el nuevo formato, no puedes hacerlo. Así que eso está claro, que me encantaría ser piloto de pruebas", sentencia el piloto de Aprilia.