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Hace ahora tres años, MotoAmerica decidió hacer un movimiento arriesgado y juntó en parrilla a las mejores baggers de cada marca. Así nació lo que hoy en día se conoce como la categoría King Of The Baggers (KOTB), donde Harley Davidson e Indian Motorcycles compiten cara a cara con máquinas que, en un principio, fueron desarrolladas para viajar por carretera con todo tipo de comodidades.
En 2022, Tyler O'Hara se proclamó campeón del KOTB al manillar de una Indian Challenger, y lo hizo además formando equipo con un piloto cuyo nombre es fácilmente identificable por cualquier fan de las carreras: el incombustible Jeremy McWilliams, que a día de hoy, a punto de cumplir 59 años, se ha embarcado una vez más en una nueva temporada en MotoAmerica, haciendo doblete en las carreras de Baggers y también en la categoría de nakeds bicilíndricas y eléctricas Super Hooligans.
Para festejar aquel título de 2022, Indian Motorcycles ha presentado una edición limitada de su bagger ganadora, la Challenger RR, que estará disponible para 29 afortunados propietarios que quieran guardar en su garaje o rodar en pista con esta singular motocicleta. ¿Por qué 29? Indian no se comió la cabeza: es el dorsal que usó O'Hara el año pasado, y el número máximo de unidades que venderá.
La moto es, en esencia, una réplica prácticamente exacta de la moto que ganó el KTOB el curso pasado; el reglamento de MotoAmerica permite introducir numerosos cambios en las baggers, aunque se debe respetar el chasis original, la estructura original del motor (aunque se puede potenciar y aumentar de cilindrada) y también es obligatorio montar las maletas de la moto de serie, o unas réplicas que conserven su forma y diseño.
La Challenger RR se impulsa gracias al motor PowerPlus V-Twin del modelo de serie, aunque profundamente modificado para aumentar su cilindrada hasta los 1.835 cc e incrementar también su caballería de serie, cifrada en 122 cv (no hay cifras de rendimiento del modelo RR). El corazón mecánico de esta bagger recibe numerosos cambios, entre ellos un kit de pistón/cilindro de gran calibre, nuevas culatas mecanizadas CNC, árboles de levas S&S y un sistema de admisión de aire de la misma marca con cuerpo del acelerador de 78 mm. De la gestión electrónica del motor se encarga una ECU desarrollada por Maxx.
Para conseguir que una bagger de más de 300 kilos de peso sea medianamente ágil en circuito, es necesario dotarla de una parte ciclo de primera; Indian le ha puesto a su Challenger RR una horquilla Öhlins FGR 250 totalmente ajustable y la ha acompañado de un amortiguador trasero de la misma marca, versión TTX. Las llantas de serie dan paso a unas ruedas nuevas, ambas de 17", calzadas con neumáticos deportivos Dunlop.
En el apartado de la frenada, Indian opta por unas pinzas radiales de freno de tipo monobloque fabricadas por Brembo, modelo M4, acompañadas de sendos discos de 330 mm de diámetro. Detrás, una pinza Hayes monopistón de gran tamaño ayuda a parar todo el conjunto.
El basculante de aluminio es totalmente artesanal, e incluye un kit de conversión de transmisión por cadena S&S y un sistema de cambio rápido, además de asiento racing Saddlemen, un cúpula Aero más deportiva y alforjas de fibra de carbono. El sistema de escape, artesanal y exclusivo para este modelo, también lo firma S&S.
"Originalmente, la idea de hacer carreras de baggers desconcertaba a muchos, e incluso era francamente ofensiva para algunos puristas de las carreras", ha dicho Gary Gray, vicepresidente de carreras y tecnología de Indian Motorcycle, durante la presentación de esta Challenger RR con motivo de la Daytona 200. "Pero en solo tres cortos años, King of the Baggers se ha convertido en lo más popular en las carreras de motos, ya que estas motos han evolucionado rápidamente. Pensamos que sería increíble darle a la gente la oportunidad de poseer la moto que ostenta la corona".
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Cada una de las 29 unidades que Indian fabricará de su Challenger RR tendrán un precio de salida de 87.000 euros, y los mercados seleccionados para su limitada comercialización serán Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Francia, Alemania y Japón. Lógicamente, se trata de un modelo exclusivo para circuito que no podrá ser homologado para circular por vías públicas.