 Redacción @todocircuitoweb |
Maverick Viñales ha comparecido hoy ante prensa con una sonrisa en su rostro tras completar su primer viernes de competición con Aprilia. El de Roses ha finalizado 20º en la combinada de las dos sesiones libres de MotoGP del Gran Premio de Aragón, cediendo 1.1 segundos respecto a la Ducati de Jack Miller y nueve décimas en comparación a la Aprilia de su compañero de equipo, Aleix Espargaró, hoy segundo.
Más allá de su anecdótica posición en la tabla de cronometraje, Maverick está contento por seguir progresando al manillar de la RS-GP cada vez que sale del box. De momento, el catalán sigue sin marcarse un objetivo de cara al domingo más allá de seguir entendiendo todos los secretos del prototipo de Noale, y ha destacado la frenada como el área en la que necesita trabajar más en comparación a la Yamaha que ha pilotado los últimos cuatro años y medio.
Finalizado el FP2 de Alcañiz, Maverick comparecía ante la prensa para resumir este día tan especial para él.
No le ha sorprendido acabar 20º: "La verdad es que no me esperaba estar más adelante, porque no es fácil. Tengo que aprender muchas cosas en muy poco tiempo, y al tener sólo 40 minutos lo hace todo muy complicado. En un test das vueltas, paras, neumáticos nuevos, mejoras ese segundo, paras otra vez, goma nueva... llegas rápido al límite. Pero en 40 minutos es más complicado, todavía me falta mucho en la pista. Creo que los tiempos han sido bastante buenos, sobre todo si cuadramos todos los parciales, estoy cerca. Es lo que tengo que hacer, cuadrar los parciales. Hoy me he intentado centrar más en el 1, mañana en el 2, el 3... ya veremos".
No se marca ninguna meta este fin de semana: "No, porque creo que para aprender bien la moto y su comportamiento no hay que marcarse ningún resultado. Más allá de buenas sensaciones y un buen feeling. Estoy bastante contento de la situación que he tenido, ha sido buena, y con la mentalidad de dar otro salto adelante mañana, es lo más positivo".
Su adaptación a la Aprilia no será tan rápida como la que tuvo a la Yamaha cuando dejó Suzuki: "La Suzuki y la Yamaha son motos muy iguales, no hay mayor diferencia más allá de que quizás una gira más, otra menos, pero todo funciona igual. Al llegar aquí el motor es diferente y la filosofía es distinta, es un procedimiento que necesita vueltas, y entenderlo. Estoy contento, me he sentido bien en el segundo round con la goma media, había buen potencial de ritmo de cara a la carrera. Es lo que tenemos que buscar ahora, más ritmo, ya vendrá la vuelta rápida".
Está lejos de sacar una buena vuelta con la RS-GP: "Cometo muchos errores, no estoy llevando la moto al máximo. Esto es importante porque al final hemos acabado con un buen ritmo, y necesitamos seguir así. La clave es mantener la calma y seguir trabajando, porque estamos lejos del máximo. En cada entreno vamos dando un salto, es el modo de mejorar".
No había pactado nada con Aleix Espargaró en el FP1 cuando cogió la rueda de su compañero: "No tenía ningún plan especial con Aleix más allá de ver lo que hace él, sus trazadas, porque son completamente distintas a las que yo estoy acostumbrado".
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Señala el área en el que más sufre en este momento: "Ahora mismo estoy frenando demasiado pronto, es mi mayor problema, porque estoy acostumbrado a un tipo de pilotaje muy diferente. Pero nos estamos acercando poco a poco, en Misano creo que acabamos bastante cerca, y aquí día a día nos iremos acercando. Lo más difícil para mí es frenar, luego acelerando la moto funciona muy bien, puedo controlar bien su deslizamiento y no me supone problema alguno. Pero todavía me tengo que acostumbrar a la frenada, porque es muy diferente a lo que estaba acostumbrado".
