Foto: Circuit Ricardo Tormo
 Redacción @todocircuitoweb |
Raúl Fernández ha tenido que esperar a su segunda temporada completa en el Mundial de Moto3 para cosechar su primera victoria en este paddock. El piloto madrileño ha subido hoy a lo más alto del podio del Circuit Ricardo Tormo de Valencia en una carrera marcada por el incidente que se ha producido en la vuelta dos cuando Celestino Vietti ha sufrido un highside y Alonso López ha golpeado la moto de Albert Arenas antes de caerse, dañando la KTM del valenciano, finalmente retirado con bandera negra.
Con sus tres rivales fuera de juego, Raúl fue capaz de mantener la concentración durante las 22 vueltas restantes controlando en todo momento la ventaja de la que gozaba respecto a sus perseguidores, conquistando así en Valencia su primera y ansiada victoria en el mundial.
"Tenemos podio, pole y victoria, lo tenemos todo, no tengo palabras", resumía el piloto del Red Bull KTM Ajo a los micrófonos de DAZN. "Esto es gracias a toda la gente que está detrás de mí, ya lo dije cuando hice mi primer podio, fue una carrera más dura, llevaba el peso de la carrera pero no controlaba cómo iban por detrás, hoy ha sido totalmente diferente, ha sido una carrera muy psicológica en la cual tenía que ir gestionando muy bien el 'gap' que tenía con los de detrás".
Raúl ha destacado su capacidad para rodar en solitario y escaparse del grupo perseguidor, algo que no se ve habitualmente en esta categoría: "Estoy contento, quiero dar las gracias al equipo y a mi familia que está desde casa, la verdad que no tengo palabras. Por fin, lo hemos conseguido, nadie consigue romper un grupo como he hecho yo hoy, es muy difícil, llevamos todo el año trabajando para hacer esto, espero que sigamos en esta línea, nos quedan dos carreras para terminar el año. Aún podemos dar guerra".
El hecho de no haber podido disfrutar de ninguna sesión de entrenamientos libres en seco no parece haber sido un problema para Raúl en Valencia: "Ha sido difícil, llevamos todo el fin de semana con lluvia, esta mañana salíamos todos a ciegas, lo que le pasará a Moto2 y MotoGP, y sabíamos quera un punto positivo para mí, siempre llego y consigo hacer el tiempo muy fácil. Esto nos va a ayudar de cara al futuro, el poder llegar y hacerlo tan fácil. Quiero llegar a casa y dar besos a mi familia".
El piloto de 20 años se está convirtiendo este año en uno de los hombres más fuertes del mundial después de un 2019 complicado en lo personal por su complicado divorcio con el Aspar Team y el accidente de tráfico que sufrió su madre en Malasia cuando acompañaba a Raúl en la gira asiática. El estrés y los nervios que llegó a acumular el piloto de KTM le llevaron incluso a plantearse la retirada.
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"El año pasado ni quiero recordarlo, llegué a un punto en plantearme si merecía la pena todo esto de correr en moto, con 20 años viví cosas que no creo que nadie tenga que vivir, ya no en tema de pilotos sino familiar", recuerda Fernández. "Pasaron cosas cuando estaba yo solo con mi madre en Malasia, fue muy duro. Ahí fue un punto de inflexión de decir, ¿de verdad merece la pena? Tengo una familia increíble, un entorno increíble, ¿de verdad nos tenemos que pasar estos malos momentos? Al final hacemos lo que amamos, no llega este momento que tanto esperas desde que eras pequeño y cuando lo tienes, la verdad que merece la pena. Es muy duro y difícil vivir momentos como el que yo viví el año pasado con mi madre, se quedan en la memoria. Ahora cuando llegas a este momento y consigues la victoria te acuerdas de ellos".
