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Aron Canet ha aprovechado una de los pocas semanas libres que tienen los pilotos mundialistas hasta la cita final de Portimao para pasar por quirófano y solucionar el problema de síndrome compartimental que el piloto valenciano arrastra desde pretemporada.
El piloto del Aspar Team se sometió ayer a una intervención quirúrgica en el Hospital IMED de Valencia con el objetivo de aliviar la presión y la sobrecarga de su antebrazo derecho, una operación que resultó ser un éxito. "Llevaba desde pretemporada con problemas. El doctor se ha sorprendido, no entendía cómo podía pilotar así. Esperamos estar al 100% en las próximas carreras", ha comentado Canet tras salir de quirófano.
El piloto de Corbera se ha adaptado muy rápido a su nueva categoría. Tras meterse en el top 10 en la cita inaugural de Qatar, Canet firmó dos quintos puestos consecutivos en el doblete de Jerez del mes de julio, metiéndose dentro de los diez primeros en la mayoría de carreras que ha disputado este año.
El español marcha séptimo en el Mundial de Moto2 con 61 puntos, y está siendo con diferencia el mejor novato en la clase intermedia. El objetivo de Canet es claro: operarse ahora de síndrome compartimental, acabar la temporada del mejor modo posible y afrontar 2021 con su físico al 100% para atacar el título de Moto2.
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