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Fuente:Sepang Racing Team
 Alex Delgado @ADelgadoM_ | Google+ |
La nueva normalidad ha llegado al Mundial de MotoGP, que acaba de echar a rodar en Jerez en la primera cita de una tardía temporada. Con el liderato de Marc Márquez en la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de España, Fabio Quartararo ha tenido un inicio mucho más complicado tras situarse en la 15ª posición, provisionalmente fuera de la Q2 a la espera del FP3 del sábnado.
Una vez finalizada la jornada, el francés atendía a la prensa y aseguraba que desde el inicio “no tenía una buena sensación con la moto, ya sea al frenar, al darle gas o al tomar una curva. Creo que fue una de las sesiones libres más difíciles que he tenido en mi carrera de MotoGP. Así que tuvimos que dar lo mejor de nosotros en la FP2 y el equipo hizo algunos cambios importantes", cuenta Fabio, que se perdió los primeros 20 minutos del FP1 por sanción.
No obstante, Quartararo ha querido hacer lectura positiva y asegura que tras los cambios han logrado mejorar su rendimiento: “Teníamos un ritmo muy bueno, lo cual es importante porque lo necesitábamos ya que la carrera del domingo tendrá lugar en a la misma hora. Estoy feliz con eso y no puedo esperar para volver mañana", añade 'El Diablo', que ha completado cinco vueltas consecuetivas en el FP2 en 38 medios, con goma usada, que demuestran un ritmo sólido de cara al domingo.
El piloto del Sepang Racing Team ha comentado que será importante saber gestionar la carrera y las altas temperaturas que se esperan en la pista. A todo ello, Quartararo ha comentado que ha seguido probando novedades en su M1: “La moto es completamente nueva para mí y no tengo mucha experiencia en MotoGP, por lo que es muy fácil perder un poco la dirección correcta. Un pequeño cambio puede ser muy útil para ayudar a desarrollar la moto o sentirse cómodo”.
El compañero de equipo de Franco Morbidelli ha comentado que por la mañana tuvo serios problemas en la moto al no poder frenar: “Fue algo muy extraño porque, cuando entré en el box les dije a los chicos que la moto no frenaba, que no tenía agarre y que no giraba. Les dije que la moto no era muy buena, a diferencia de lo que había encontrado el miércoles. Al final, encontramos algo con el equipo al hacer un cambio en la moto número uno y otro cambio en la moto número dos. Me dijeron que probara ambas y que eligiera la que prefería para finalizar la sesión”.
El galo ha destacado que “la moto de 2020 no es como la 2019”. En ese sentido, Quartararo ha asegurado que "la Yamaha de este año es mucho más difícil de pilotar que la del año pasado, así que creo que todos tendrán que cambiar un poco su opinión sobre el hecho de que la Yamaha es una moto fácil”.
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Por último, Quartararo ha asegurado que todavía es muy pronto para poder sacar conclusiones sobre la moto de este año, aunque ha mandado un mensaje a su equipo respecto a la velocidad punta: “Honestamente, realmente no puedo juzgar las fortalezas y debilidades de la moto, aunque, por supuesto, sabemos que su principal problema es la velocidad punta. Pero estamos trabajando en ello y deberíamos ver la evolución después de algunas carreras. Por el momento, es muy difícil decir algo porque es solo el primer circuito, pero puedo ver que la moto tiene potencial”, concluía el francés.
