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Valentino Rossi está de vuelta. El italiano ha regresado del parón vacacional con las pilas cargadas y dándole la vuelta a la complicada situación que vivía con su M1. El de Yamaha ha finalizado en la segunda posición en la sesión de clasificación del Gran Premio de Gran Bretaña tras marcar su registro rodando en solitario con Marc Márquez a su estela.
Una vez finalizada la sesión ha hablado con la prensa. En unas declaraciones recogidas en GPOne, Rossi se ha mostrado feliz por el resultado logrado: “Ya era hora. Estoy muy, muy contento y creo es para mí la primera fila más bonita de los últimos años. En la parte central de este campeonato pensaba que podría ser fuerte, había carreras como Mugello y Assen que me gustan mucho, pero fui lento. Las otras Yamaha eran competitivas, Viñales ganó en Holanda y Quartararo era siempre rápido, yo no”.
El de Yamaha ha destacado que desde el equipo se ha producido un cambio en la manera de trabajar: “desde Brno en adelante me he reencontrado con mi moto y he mejorado progresivamente. A mi edad, si en carrera no te diviertes o no eres competitivo, todo se vuelve pesado”.
En los últimos años se ha hablado mucho de la posible retirada del #46. El italiano ha señalado que a su edad, "solo hacen falta tres carreras malas para saber que eres viejo y es hora de quedarse en casa. Por esta razón, ahora estoy aún más feliz, sé que todavía puedo ser competitivo. Sin embargo, el día importante es mañana”.
Tras el parón vacacional algo cambió en Yamaha: “En Brno hicimos algunos cambios grandes, porque no podía ser incisivo la frenar y al entrar en curva, generalmente dos de mis puntos fuertes. Yamaha comenzó a trabajar de manera inteligente en cosas que había estado pidiendo durante dos años y medio, la aceleración y el consumo de gomas, pero nunca había habido una respuesta. Desde hace dos meses a ahora la situación ha cambiado, podemos mejorar tanto de cara a las próximas carreras como del próximo año”.
El compañero de equipo de Viñales ha admitido que todavía es muy pronto para pensar en 2020: “Primero está la carrera de mañana, después la de Misano y todavía quedan muchos otros Grandes Premio y el tercer puesto en el campeonato que no está muy lejos. Entonces puedes pensar en el próximo año, porque todavía tenemos que mejorar. La diferencia de Márquez y Dovizioso es todavía grande, perdemos 7 u 8 segundos en carrera y nuestra velocidad punta es al menos 10 km/h inferior a la de los otros. Debemos empezar a reducir a la mitad esta diferencia”.
La lucha por la victoria no es imposible pero admite que “sobre el papel, Márquez y Quartararo son los más rápidos, me gustaría quedarme con ellos, hacer una buena carrera como en 2017”. No obstante, Rossi se mantiene cauto y destaca que “por el momento es difícil pensar en una estrategia, el sábado solo puedes tener algunas ideas, lo importante es lo que sucederá en la carrera y las sensaciones que tendré en la moto”.
Respecto a estrategia de Márquez de utilizarle como referencia para marcar su tiempo de pole en la Q2, Valentino le ha restado importancia a este asunto: “Quería dejarles pasar [a Miller y Márquez], pero todos esperaban, cuando he visto a Marc ahí sabía que no iba a tirar porque él ya tenía el tiempo, así que si me esperaba se nos iba a hacer de noche. Al final he tirado y he hecho una gran vuelta".
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Por último ha comentado que será complicado parar a Márquez el domingo: “Para eso debo ser muy, muy rápido. Sobre todo, nosotros sufrimos todavía en la velocidad punta y esto a menudo hace que sea difícil superarle. Quizá sea una carrera grupal con Márquez, Quartararo, Viñales, Rins, Dovizioso, Crutchlow y Miller, tienen todos un buen ritmo. Mañana tendré que estar preparado para todo desde el inicio, me gustaría luchar por el podio o al menos estar cerca de él”, concluía Rossi.