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 Laura Rangel @todocircuitoweb | Google+ |
El fatal accidente de Carlin Dunne durante el Pikes Peak International Hill Climb (PPIHC) de este año podría ser la gota que ha colmado el vaso, obligando a la organización a considerar una vez más prohibir la participación de motocicletas en esta histórica carrera.
Carlin Dunne estaba a escasos metros de cruzar la línea de meta para marcar un nuevo récord con la Ducati Streetfighter V4 cuando un bache a la salida de la última curva rápida le hizo perder el control de la moto hasta despeñarse por un barranco. En ese momento, el piloto norteamericano venía liderando todos los parciales e iba camino de conseguir un nuevo récord y la victoria en esta edición.
Esta desgracia se suma a unos últimos años especialmente desgraciados para la subida a Pikes Peak, con tres pilotos de motos fallecidos en el último lustro.
En 2014, Bobby Goodin murió al estrellarse inmediatamente después de cruzar la línea de meta en la cima de Pikes Peak.
En 2015, Carl Sorensen perdió la vida en un accidente durante los entrenos.
La suma de fatalidades han hecho que la organización se replantee el futuro de la prueba. Según publica gazette.com, la Directora Ejecutiva de la carrera, Megan Leatham, ha escrito un correo electrónico a los funcionarios de la ciudad de Colorado Springs y a los funcionarios del Servicio Forestal de los Estados Unidos, anunciando que este sería el último año en el que las motocicletas compitiesen en el evento.
Esta no sería la primera vez en la que las motos son prohibidas en Pikes Peak, que ya han sido vetadas de la competición en cinco ocasiones a lo largo de la historia.
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