 Redacción @todocircuitoweb |
Aleix Espargaró protagonizó este pasado domingo una de las imágenes del Gran Premio de Catalunya después de verse obligado a abandonar la carrera en la primera vuelta por un contacto con su compañero y wild-card de Aprilia, Bradley Smith.
El piloto de Granollers llegó a su box con evidentes gestos de dolor, incapaz de bajarse de su moto. Sus mecánicos tuvieron que cogerle en brazos y llevarle dentro de su box, donde una ambulancia le estaba espertando para visitar el Centro Médico del Circuit.
Tras una revisión rápida, el mayor de los Espargaró fue trasladado a la Quirón Dexeus de Barcelona para someterse a un TAC. El fuerte edema óseo que Aleix sufría en su rodilla izquierda impidió a los medicos determinar el alcance de la lesión en un primer momento; esta mañana, ya con menos hinchazón en la zona, un nuevo TAC ha revleado que Aleix sufre una microfractura en el fémur y una lesión en la tibia izquierda.
Por fortuna, los ligamentos de esa zona no se han visto afectados, y tampoco hay prevista ninguna cirugía, de modo que los médicos confían en que Espargaró pueda subirse de nuevo a su RS-GP dentro de dos semanas con motivo del Gran Premio de Holanda, aunque el OK definitivo tendrá que darlo el equipo médico del campeonato.
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"Me siento aliviado después de que las pruebas mostraran una mejor situación de la que se esperaba inicialmente", ha comentado el piloto de Aprilia. "Sin embargo, lamento haber perdido este día de test, mi objetivo es comenzar la recuperación lo antes posible y acelerar mi regreso sobre la moto, de manera compatible con la respuesta de los médicos. Ya me han dicho que en un par de días podré volver al ciclismo, ¡estoy contando las horas!".
