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Un motorista norteamericano que participaba en una jornada de tandas libres en el circuito de Texas World Speedway sobre una Yamaha R1 se llevó una desagradable sorpresa cuando la cámara GoPro de otro participante impactó contra su moto a más de 200 kmh. La cámara golpeó primero la cúpula de la moto partiéndola en dos, y después impactó contra el cuerpo del motorista, que se llevó un buen moratón de recuerdo.
Es importante fijar bien las cámaras cuando entramos a rodar en circuito para evitar este tipo de sustos. Un buen truco es usar algún tipo de cable de seguridad (por ejemplo el de las cañas de pescar) para atar la cámara a algún elemento fijo de nuestra moto y evitar así que, en caso de que falle la ventosa o el adhesivo, no salga disparada.
