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Héctor Barberá llegaba a Japón dispuesto a recortar puntos en la clasificación a Loris Baz y desde el primer día ha sido el piloto más fuerte de la categoría Open con el asfalto seco. Pero hoy la lluvia ha hecho acto de presencia y todo ha comenzado de nuevo para el piloto español del equipo Avintia Racing. En el warm up enseguida se ha encontrado cómodo, y ya en la salida ha logrado recuperar unas cuantas posiciones. Después ha seguido remontando hasta colocarse en el top 10 para cruzar la meta en novena posición y sumar siete valiosos puntos que le devuelven el liderato en Open a falta de tres Grandes Premios.
Héctor Barberá
"Esta era mi carrera número 100 en MotoGP y en un circuito en el que tenía buenos y malos recuerdos. Aquí he ganado carreras, pero también he tenido que salir en helicóptero. Por eso Motegi siempre me creaba incertidumbre, pero este resultado lo cambia todo. Durante todo el fin de semana habíamos rodado muy bien en seco y lo teníamos todo muy claro, pero ha amanecido lloviendo y es como si el fin de semana volviese a empezar de cero. En el warm up he ido muy bien y he podido aprovechar toda la sesión para coger sensaciones".

"Quiero dar las gracias a Jarno, mi jefe de mecánicos, porque ha hecho una puesta a punto muy buena, y también a Penny, nuestro ingeniero electrónico de Ducati porque he podido gestionar muy bien la carrera. Ha sido duro psicológicamente porque a partir de la vuelta 15 no tenía a nadie delante, pero los de detrás estaban a dos segundos. Me iban apretando y sin nadie delante es muy fácil cometer un error, así que he decidido disfrutar de esas vueltas. Este noveno puesto nos devuelve la primera posición en Open y me deja más tranquilo, porque la verdad es que después de Misano estaba muy enfadado. Ahora vamos a Phillip Island, un circuito que me encanta y donde esperamos poder aumentar la ventaja en la provisional."

"Quiero dar las gracias a Jarno, mi jefe de mecánicos, porque ha hecho una puesta a punto muy buena, y también a Penny, nuestro ingeniero electrónico de Ducati porque he podido gestionar muy bien la carrera. Ha sido duro psicológicamente porque a partir de la vuelta 15 no tenía a nadie delante, pero los de detrás estaban a dos segundos. Me iban apretando y sin nadie delante es muy fácil cometer un error, así que he decidido disfrutar de esas vueltas. Este noveno puesto nos devuelve la primera posición en Open y me deja más tranquilo, porque la verdad es que después de Misano estaba muy enfadado. Ahora vamos a Phillip Island, un circuito que me encanta y donde esperamos poder aumentar la ventaja en la provisional."