
Duro golpe al motociclismo español. Joan Garriga ha fallecido hoy en Barcelona a causa de un accidente de moto que sufrió el pasado lunes, cuyas lesiones no ha podido superar. "Comecocos" Garriga tenía 52 años, y parecía estar remontando el vuelo tras unos años complicados a nivel personal, incluyendo dos infartos de los que pudo recuperarse gracias, en parte, a la ayuda de Sito Pons, su mayor enémigo en la década de los 80, cuando ambos pelearon por el título mundial de 250 en 1988, una pelea que finalmente ganó Pons tras una temporada apasionante.
Joan Garriga nació en Vallvidriera hace 52 años. Sus primeros pasos en el mundo de las dos ruedas comenzaron en 1980, cuando tenía 17 años, apúntandose a varias subidas en carretera sobre una Yamaha TZ 250. 1984 fue uno de sus mejores años, ganando el Nacional de Velocidad de 250 y las 24 Horas de Montjuic, disputando además varias carreras del Mundial. Un año después, en el 85, corrió el Mundial de 250 completo sobre una JJ-Cobas, ganando una vez más en Montjuïc sobre una Suzuki GSX-R 750, uno de los primeros éxitos de este modelo en competición.
Joan Garriga durante uno de sus últimos homenajes
Tras un año complicado con la Cagiva 500 en 1986, volvió a su categoría favorita del cuarto de litro un año después con una Yamaha Ducados. En Jerez subió por primera vez al podio (3º), y terminó 11º a final de temporada. Después llegó 1988, su mejor año, cuando se disputó el Mundial de 250 con Sito Pons ganando tres carreras, logrando finalmente el subcampeonato. En 1989 la Yamaha no funcionó tan bien y acabó el mundial 8º.
En 1990 saltó a 500 cc sin demasiado éxito, aunque dos años después, en el 92, conseguirá su primer y único podio en la categoría reina en Donington Park, también con una Yamaha. En el 93 rechazó una oferta de Suzuki en 500 y terminó corriendo el Mundial de Superbike con Ducati, donde logró un podio en Hockenheim, retirándose poco después cuando sólo tenía 30 años.
Tras su retirada, Garriga ha participado de forma intermitente en algunas carreras urbanas como el Gran Premio de La Bañeza, cita que no solía perderse. Una de sus últimas apariciones fue en el World GP Bike Legends de Jerez el pasado mes de junio, donde completó varias vueltas a lomos de una Ducati 916.
Desde Todocircuito.com queremos expresar nuestro respeto y admiración por un piloto tremendamente carismático que siempre quiso correr más que la propia vida.