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De vuelta a Inglaterra, donde el francés vive con su mujer e hijas, una nueva resonancia magnética y diversas radiografías han descartado cualquier tipo de fractura, si bien Guintoli tendrá que seguir una terapia física y completar varias sesiones de cámara hiperbárica para llegar al 100% a la cita inaugura del campeonato en Australia el próximo 22 de febrero.
"Todavía siento dolor en la espalda, pero puedo poner peso sobre el tobillo y me alegro de que no haya nada roto", ha comentado Guintoli al portal Worldsbk.com. "He comenzado mi tratamiento y necesitaré algún tiempo, pero estoy seguro de que estaré listo para el inicio de la temporada, el próximo mes en Phillip Island”.
"Al final ha sido frustrante perderse el test de Jerez, sobre todo porque las condiciones meteorológicas eran muy buenas. Pero tenemos otro test de dos días en Australia antes de la primera carrera. Ya había podido evaluar el trabajo que se había hecho en la CBR durante el invierno, así que soy optimista para la primera carrera", sentencia el francés, que este año cambia la Aprilia RSV4 con la que se proclamó campeón en 2014 por la CBR 1000RR Fireblade del equipo PATA Honda.