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Pocas cosas unen más a un padre y aun hijo que las motos. Disfrutar de esta pasión junto a tu ser más querido es algo que no todo el mundo tiene la suerte de experimentar, pero como todo en esta vida, el motociclismo también entraña sus peligros, y ser testigo directo del accidente de tu hijo es una las experiencias más desagradables que puede vivir un padre.
Este vídeo, con final más o menos feliz, es el ejemplo perfecto; padre e hijo, ambos italianos, están disfrutando de una ruta dominical sobre sus máquinas, una MV Agusta F3 para el progenitor y una Aprilia RS660 para el chico, una moto que precisamente había estrenado hace un par de semanas.
El ritmo de ambos es 'ligerito', tocando rodilla en alguna curva y con más velocidad de la deseada en una carretera que, seguro, tuvo sus mejores días en el pasado. A la llegada de un viraje de derechas, el chaval entra demasiado confiado y a una velocidad que le impide hacer la trazada correcta, y entonces llega el desastre: toca el freno delantero, la moto se desestabiliza y acaba perdiendo el control de la máquina.
El padre, horrorizado, observa toda la escena solo unos metros por detrás, siendo testigo del fortísimo golpe que su hijo se lleva en la espalda, quedando inmóvil sobre el asfalto. Presa de un ataque de pánico, el padre se acerca rápidamente a su hijo entre lloros y gritos de desesperación, interesándose por su estado.
Curiosamente, es el chico el que intenta calmar a su padre diciéndole "tranquilízate papá" cuando ve que su padre rompe a llorar. Aquí llega el primer gran error de ambos: el chaval le dice que está bien, y entonces se levanta para apartarse de la carretera y colocarse a la sombra, un fallo garrafal tras haberse llevado un golpe tan fuerte en la espalda.
Un par de minutos más tarde, llega la esperada reprimenda paterna; el padre le dice que "no es divertido ir así" y que de este modo "al final te haces daño". "En la primera curva ya ibas a 200 por hora, no podía ni seguirte", le suelta a su hijo.
Y al padre todavía le espera lo peor, avisar a su mujer: "Mamá me va a matar", a lo que el hijo le pregunta tímidamente "¿qué le decimos?", y la respuesta del padre es directa: "Todo, ¿qué quieres que le cuente? Que íbamos con las motos y te caíste".
En el comentario que acompaña al vídeo, su protagonista y víctima del accidente explica lo ocurrido y el parte de lesiones tras su paso por el hospital: "Este es el vídeo de mi accidente el 19 de julio de 2024. Se suponía que iba a ser una ruta feliz con mi padre, pero se convirtió en una pesadilla. Por desgracia me rompí dos vértebras y el talón derecho, y luego me operaron de la espalda donde me insertaron dos dispositivos de síntesis con tornillos. Por la dinámica del accidente puedo decir que tuve suerte, desgraciadamente me caí por un error mío causado por mi falta de confianza con la moto (que tenía desde hacía dos semanas). Tras la caída me levanté y me salí de la carretera (algo que no debo hacer en absoluto), de hecho corrí un grave riesgo para mi columna vertebral. Sin duda aprendí mucho de lo sucedido y espero transmitiros lo que entendí del vídeo".
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Puedes ver toda la secuencia completa a continuación:
