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Jorge Martín no ha sido capaz de impedir un nuevo doblete de victorias de Pecco Bagnaia, el tercero que consigue el piloto de Turín este año. El madrileño se pasó media carrera del Gran Premio de Austria a rueda de su rival italiano, una posición que acabó sobrecalentando su neumático delantero y que obligó a Martín a aflojar su ritmo en las últimas vueltas de la prueba, echando por tierra sus aspiraciones de frenar a un Bagnaia que se encuentra en un estado de gracia absoluto.
El piloto del PRAMAC Racing reconocía estar "un poco disgustado con el resultado final", convencido de que cometió un error en las primeras vueltas al dejar que Bagnaia se afianzara en esa primera posición: "He querido esperar un pelín, pero ha sido claramente una decisión incorrecta, porque en el momento en el que estás detrás, se recalienta la goma. Es la historia de siempre. Desde la segunda posición he intentado defenderme y atacarle, pero me la estaba jugando mucho".
Sin molestias en su pulgar izquierdo -el mismo que se cortó el viernes por la noche saliendo de la ducha-, Martín hizo todo lo que estuvo en su mano para tratar de incomodar a un sólido Bagnaia que, de nuevo, demostró su fortaleza mental: "Cuando ha vuelto a coger distancia me encontraba otra vez bien con la parte delante, he intentado meterle un pelín de presión desde lejos, que notase que no tiraba la toalla. Al final ha tenido una marcha más hoy también. Creo que de haber mantenido esa primera posición habría sido una carrera diferente. Es lo que hay".
Visto lo de hoy, Martín tiene claro que "tenemos que cambiar de mentalidad de cara a los próximos fines de semana" y no permitir que Pecco Bagnaia lidere con tanta facilidad, y se consuela sabiendo que "estamos en la pelea, son solo cinco puntos y me encuentro bien".
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Cuestionado por el pilotaje de su rival italiano, Jorge opina que "Pecco tiene un poco más en las frenadas últimamente, consigue parar algo mejor la moto, entrar con más velocidad en la curva. Luego pierde un poco en la salida, pero ese tiempo que gana entrando, pues es difícil de adelantar, y al final tiempo por vuelta es casi igual".
"Estando detrás se vuelve todavía más difícil, se recalienta todo. Intentaba salir de su rebufo, enfriar la goma lo posible. En la vuelta 10 he pasado de poder seguirle a casi caerme en cada curva, eso ha marcado la diferencia", resume un Jorge Martín que no gana una carrera desde la Sprint Race del Gran Premio de Alemania.
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De cara a la próxima cita de Aragón, Jorge se pone como deberes mejorar su velocidad en los primeros compases de la carrera e impedir que Pecco controle los ritmos: "Está claro que el que está primero tiene el 90% de posibilidades de ganar, eso está clarísimo. Tenemos que mejorar las primeras vueltas para plantarle cara. Son solo cinco puntos. Aragón es una buena pista para él, a ver cómo va. Espero ser un poco más competitivo", zanja el #89.
