James Ellison fue una de las grandes sorpresas de los últimos test privados de equipos CRT celebrados esta semana en el Circuito de Jerez. El británico no se cansó de dar vueltas sobre su PBM Aprilia al trazado andaluz cinco años y medio después de su último contacto con una moto de la máxima categoría del mundial (2006, Yamaha Tech3).
El piloto de 31 años ha hablado sobre su nueva CRT en el portal oficial de MotoGP, de la cual ha dicho ser una moto "muy manejable". Ellison comenta que "al principio pensaba que llegaría y empezaría a decir 'tenemos que cambiar esto, necesitamos ajustar aquello', pero en verdad se siente como una moto de carreras. Estoy muy impresionado".
"Los neumáticos tienen muchísimo grip, el delantero no se me ha ido todavía. Siento que estoy yendo todo lo rápido que puedo teniendo en cuenta que llevo mucho tiempo sin subirme a una moto. Todavía estamos a algunos segundos de nuestra meta, así que puede que cuando los tiempos lleguen empezaré a sentirme igual que el resto de pilotos. Los chicos del equipo y yo estamos aprendiendo y por ahora el objetivo es seguir adelante con la moto de una pieza".
El mejor tiempo de Ellison en Jerez fue de 1'42.526, mientras que la CRT más rápida de los test privados, la ART de De Puniet, paró el crono en 1'40.300. Para Ellison se trata de un buen tiempo teniendo en cuenta que usó discos de freno de acero en vez de carbono como los otros equipos.
"Las motos son idénticas a excepción de los discos de acero. Los discos de carbono serán una gran ayuda cuando los tengamos, he intentado seguir a algunos pilotos en la frenada y no podía hacerlo: intentaba frenar donde ellos y la moto se iba fuera. El potencial es enorme. Creo que será un conjunto muy fuerte. De entre todas las CRT, las ART -con motor Aprilia RSV4- parecen ser de las mejores, si no lo son ya. Todavía es pronto, pero potencialmente es una gran moto".
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