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El pasado 30 de noviembre finalizó el contrato que vinculaba a Michael Van der Mark con Honda, y sólo un día después, Yamaha ha publicado en la edición digital de su revista mensual una completa entrevista al nuevo piloto del PATA Crescent Yamaha, que cubrirá la baja de Sylvain Guintoli en el equipo de fábrica de la fábrica de Iwata en el Mundial de SBK.
El holandés llega a Yamaha con el objetivo de luchar por su primer título en el WSBK, tomando el relevo de Ben Spies, el último campeón con la marca japonesa en el año 2009. Van Der Mark, que llevaba ligado a Honda desde que ganó su primer y único campeonato del mundo de Supersport en 2014, asegura que "la oportunidad ha llegado en el tiempo correcto para mí. Estos resultados han sido buenos la temporada pasada, pero necesitaba un nuevo desafío: conocer gente nueva, trabajar en un equipo diferente y con una moto diferente”.
El holandés ya se ha subido a la YZF-R1 en los test de Aragón y Jerez, y ya adelanta que sus primeras sensaciones "fueron realmente buenas. Me sentí feliz con la moto. Tenemos mucho trabajo por hacer, pero ya puedo sentir la potencia de la YZF-R1, lo que me motiva aún más para la próxima temporada”
Los cambios no son fáciles y, acostumbrado a la disciplina de Honda durante tantos años, comenta: “El equipo es maravilloso; tienen mucha experiencia y trabajan muy duro. Creo que podemos decir que desde el principio todos tuvimos muy buenas sensaciones y trabajar con los chicos fue genial desde la primera prueba”.
Cuestionado por las ambiciones que tiene de cara a la temporada 2017, el entusiasta piloto responde: “Sólo tengo una meta y es ganar carreras y pelear por el campeonato”. Según los rumores, el holandés planea el salto a MotoGP con el Yamaha Tech3