Estoy seguro de que las ganas de rodar no nos dejan pensar, normalmente de manera objetiva. Y estoy seguro también de que yo me vería en ese mismo dilema. Pero seamos cautos. Los profesionales a veces se juegan mucho y se la juegan una y mil veces si hiciera falta pues a la vez, de poder ganar o perder mucho, es su profesión. No debemos ponerlos a ellos de ejemplo.
Yo te diría que hicieses lo siguiente, algo nada desconocido. Hazte una lista. Pros y contras. Que gano, que puedo perder,.. y verás si merece la pena realmente hacer esa rodada.
Desde mi punto de vista, teniendo en cuenta que tienes la opción de aplazarla o venderla,.. SI fuese una simple torcedura.. pero un esquince.. que no puedes ni apoyar el pie.. yo no me la jugaría. Lo disfrutarás igual? un saludo.