Tras una mala racha circuitera con caídas y una rodada en Cheste en la que no me divertí nada encima de la moto, estaba entre dejarlo o empezar otra vez desde cero... y no he podido tener mejor vuelta que de la mano de @
JKcompeticion, haciendo el curso y un par de tandas personalizadas.
Y es que el buen hacer de Jose no empieza el día de la rodada, sino tiempo antes, hablando conmigo y preparando el curso personalizado. Desde el principio demuestra un interés y una implicación digna de admiración.
Llegó el día, después de más de 9 meses sin rodar entre unas cosas y otras (trabajo, un curso anulado con Cardoso que tarde o temprano haré y el "miedo" que le había cogido a la moto), el viernes cargué la moto en el carro y salí con mi mujer dirección Almería. Tras comer esperamos un rato y nos acercamos al circuito... y ahí empecé a darle faena de la buena a Jose, bueno, y a Tito, demostrandome que tienen bastante paciencia jejeje.
Esa noche la verdad es que dormí poco, ya que surgió un problemilla con la horquilla que tenía que ver Gerard de Hagon (un tío majísimo), pero al final todo estaba bien (que no perfecto) y tocaba rodar... después de un buen briefing con sorteo incluido y aviso de expulsión a quien tome alcohol u otras sustancias (chapeau por la organización), cambié los slicks
Bridgestone por unos GPRacer rayados. La moto me parecía enorme... una cbr600rr '06, pero me parecía una Goldwing.
En la primera tanda con monitor fui fatal, tieso, agarrotado... vamos, como si fuera a comprar el pan. Por lo que tuvieron que pasarme y dejarme atrás, lo que no me fue mal, porque me tranquilicé y poco a poco me iba soltando.
La segunda tanda y la cuarta las hice con Jose con el posterior visionado de la grabación, con explicaciones, consejos, detección de fallos... es una pasada lo que se puede sacar de una tanda y de los comentarios de alguien que sabe lo que se hace y le apasiona lo que hace. Y viendo los vídeos me parecía mentira que, teniendo la sensación de ir descolgado y tumbando, en realidad ni una cosa ni la otra
. Al final llegó un momento en el que poco más me podía decir, ya es cuestión mía el soltarme, volver a coger confianza y rodar, rodar y rodar.
Lo mejor, es que acabé divirtiéndome encima de la moto... Aunque de eso tiene gran parte de culpa la organización, ya que todo el mundo parecía estar a gusto en los boxes, lo que se tradujo en uno de los mejores ambientes que recuerdo en todas las rodadas que he hecho, aunque no sean muchas. En pista, me adelantaron muuuchas veces, pero nunca de forma agresiva ni de malas formas, así es como debería ser siempre. Lo único malo fueron las varias caídas que hubo y las dos banderas rojas... ánimo a los que cayeron (el primero si se hizo daño de veras) y una pronta recuperación.
Y ahora, pues bueno... tengo unas ganas increíbles de volver a rodar!! Aunque me lo tengo que seguir tomando con mucha tranquilidad y avanzar poco a poco, que ya he visto que las prisas no van nada bien.
Encantado de conocer y rodar con Jose (y todo su equipo)... y dar las gracias también a un chaval de Valladolid (no conozco su nombre) que curiosamente empezó como yo, con una gsr600, con el que coincidí el sábado por la tarde bajando las motos y el domingo se acercó a preguntar que tal se me estaba dando del día y estuvimos un ratillo charrando.
Me quedó claro que la moto no es un tren que va por raíles, que está "viva" y se tiene que mover para decirme que hace el asfalto. Y otra buena frase, esta de Gerard, es que lo más importante del día, es la cena de esa noche con la moto entera en el garaje.
Rodada hecha... y sin tener que reparar carenados
fuera de coñas... comparando los vídeos con fotos de otras rodadas, me doy cuenta de lo que he atrasado por querer correr tanto.