Bueno esta historia se contará en tercera persona, ya queno seré yo el que corra sino mi padre.
Santander 2011:
Como dueño de moto clásica, oye de una concentración en el norte, en la que además de sus increíbles rutas y contundentes comidas, hay un gran anuncio: carrera en el sardinero.
El evento se hace con la idea de volver a rememorar aquellas carreras clásicas en las que no existían circuitos perrmamentes como los que hoy tenemos. Se pone la máquina en marcha.
De cero, empieza a construir una Derbi de 50 de carreras, que será bautizada más adelante con el nombre de Ran Réplica.
Horas de trabajo, la ayuda y apoyo de muchos compañeros, hasta que finalmente dos semanas antes del evento, la moto arranca por primera vez: cilindro de 74 gilardoni, carburador amal de 18, estriberas retrasadas made in Luis, escape Gianelli de Carreras Cliente...Y la moto anda. Y mucho. También decir que era la Derbi más incómoda jamás construida.
El día de la carrera:
Revuelo general en el circuito "¿en serio esa Derbi va a correr?" muchos señalaban y reían, otros vacilaban, pero sólo había que esperar a salir... Primera de las 3 rodadas programadas.
Y la moto se para. Vuelta al box, hasta el momento sólo dos vueltas con alcantarillas, bordillos. Pero no hay miedo. En el box, herramienta en mano, se saca la bujía, !Había hecho perla¡ Sorpresa ante todo, pero también una sonrisa en la cara :"quieres guerra" pensó. Y así la hubo en la segunda tanda. Parrilla de salida, paragüera incluida - Mari-, por que las carreras se disfrutan, pero con la familia más.
Ahora la gente vacila con la derbi "Que no se rompa, que los inventos siempre fallan". Hay que salir de la pista, un beso y un "Suerte" de su mujer. casco puesto, visera abajo y la bandera da inicio a la carrera.
En la pista ya no hay alcantarillas ni bordillos, por delante asfalto, y por detrás de él empieza a haber gente. ya no habrá risas en los boxes Uno a uno, la Ran Réplica fue superando a Bultcaos, Montesas, Scout, Yamaha... Nada mal para ser una Derbi made in carpinteria, Vuelta de honor, y aunque no pudo con las tzr 250, hubo vitores para el piloto Paco Rincón y su máquina. y mucha alegría en él. Le quedaba una tanda y dijo que iría a tope. Y así lo hizo. Mejoró respecto a su última incursión al circuito. Y todavía entonces, recogiendo para su vuelta a casa, le volvieron a felicitar por su gran espectáculo.
Pero había algo que no sabía, y es que el gusanillo de las carreras puso huevos. Y estos han eclosionado.
Enero de 2013:
Con vistas a intentar algo más serio que una Derbi, empieza la búsqueda de una clásica de carreras: la primera idea es honda, honda es la idea... Pero apareción ante él una montesa impala 250 a la que no hay que hacerla nada. Y finalmente se hace con ella.
Mayo 2013:
Jarama vintage Festival en Junio. el momento para probar su Montesa blitz, pero antes los preparativos. Federarse, encontrar un mono de 1 pieza y formalizar la inscripción. Todo esto se hace en el plazo de dos semanas, pero ocurre una cosa: no sabe como va su blitz. Así que decidido a ello, en un parking privado la arranca y se sube en ella. Le impone su estruendoso sonido, la posición de conducción, y por encima de todo eso, se asusta. En ningún momento pudo pasar de primera. Vuelta la moto a los caballetes, y hace dos llamdas: una a su compañero Pedro Martín, que le ayudará en la puesta a punto de la moto, y la otra al también piloto de clásicas, Paco Nieto, que le asesorará y aconsejará.
Junio 2013:
Quedan tres días para la carrera. Ruedas nuevas montadas, tapones sellados, estudiando posicion de conducción, presiones para las ruedas. Los cuatro reunidos en torno a la Montesa . Se sube otra vez en ella - la segunda- pero esta vez no la arranca. Recoge los pies, los acopla en las estriberas. "Tengo mied. No de hacer el ridículo. Sino de la moto. No la conozco nada"- dijo Paco Rincón- "Pero estoy seguro que cuando nos hagamos amigos, vamos a dar guerra"
Así es como de un pequeño evento, mi padre va a dar el salto a una categoría nacional. 52 años sus espaldas, pero subido en una moto, las ganas y la la alegría de aquel joven de 16 años que subido en su Derbi Antorcha Supercampeona soñaba con correr. Y este fin de semana va a cumplir su sueño.
Crónica de una primera vez
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