Buenoooooo, al final tengo un ratito para mi, antes de este festivo tan esperado y que a la peña vuelve loco, el largarse y estresarse haciendo cola en las carretera, y salir de la rutina. En fín...
Estábamos en que dejé preparada la máquina para tres apasionantes entradas después de comer.
Recuerdo que el viento no cesaba, no llegaba a ser molesto del todo, pero si no te tapabas con chaqueta o jersey de invierno, te quedabas como pollito. Los estiramientos y el hielo aplicado a mis manos, junto con los paracetamoles iban haciendo el efecto esperado, aún así la sensación de "acartonamiento" de algún dedo era notoria. El sufrir forma parte de mi día a día, y si se llegan a cerrar y/o enganchar algún dedo, veo estrellitas
, engatillados los llaman.
Cinco minutos antes de salir arranco motores, visto de torero y al ruedo !!. Ya en la 2ª curva me empieza a fallar incluso estirando a medio régimen, y en toda la vuelta no hay maneras de que suba de vueltas ininterrumpidamente. Así que salgo de la trazada y regreso con un enfado contenido pero monumental en el interior, hacia mi parcela de box. Ni pongo calentadores, pues incluso al ralentí, en pocos segundos se paraba el cuidado motor.
Me ve Sergio y evidentemente me pregunta el motivo de mi careto. Serio sin querer estarlo, me debían salir humos por las orejas a pesar que mi boca intentaba sacar palabras que no lo parecieran. Que falla, no se porque, pero no funciona.
Inmediatamente me ofrece su preciosa Triumph tricilíndrica, y me dice que monta además los mismos Bridgestone que uso yo, para que me sienta "como en casa"
. Rechazo su generosa oferta, pues ya me la ofreció en otras ocasiones -quería probar una !!!! desde hace años
-, pero en mis casi 3 décadas de circuitos, apenas he aceptado probar una docena de motos que no fueran mías. Tanto por respeto, como por actualmente mis condiciones físicas, que no son ni mucho menos las mejores ni aceptables diría yo, ante un imprevisto o necesidad de acto reflejo con dominio de la moto. Le agradezco de todo
sus intentos por alegrarme el día, pero yo tozudo que tozudo -procedencia maña por parte materna-, que no, que me quedo con mis penas y mi mala suerte y...saco a relucir mis valores estoicos.
Me siento aún con el mono puesto, con intención de irme cambiando...y pienso, meses esperando, cientos de horas en el agua del mar ejercitando y estirando, no recuerdo ni los tratamientos con medicación, natural, cremas, fisios, unguentos...y ahora que estoy aquí, lo voy a despreciar ???. Haz caso a lo que dicta tu s ganas, y adelante
Voy en busca del ofreciente, y le pido por favor que me deje la tres pistones
, que me muero de ganas. Sí hombre si, ahora te lleno el tanque y palante !!.
Y ni corto ni perezoso -eso menos-, le pido que si me puede acompañar. Coge la Aprilia de Javier, y saliendo yo delante, haré un par de giros, en la larga recta que me pase e indique los errores que vea y me los vaya corrigiendo con su trazada, y en otro par de giros, que no me espere y tire, que yo trabajo tendré con entenderme con la inglesa, como para pedir peras al olmo.
Uffff que bien lo pasé...aún recuerdo la sensación primera al montarme, algo más larga que la R6 me pareció, al primer toque de freno, casi salgo por delante de la cúpula. Esto promete, sensaciones fuertecitas...la palanca de cambio suave como rociada de mantequilla, entran las marchas con tal de insinuar el cambio, precisa. Quizás algo blanda de horquilla en un primer momento, pero creo que solo fué la sensación...sigo en breve. GRACIAS
