La verdad es que el clima fue ideal para rodar... todo un alivio después de haber salido esa misma mañana desde Alicante lloviendo.
Y todo salió bien, incluso mi salida por orejas sin consecuencias... la moto con fibras para reparar (pero no rotas, sino rajadas), pillar otra cúpula y yo, sin nada más que un par de contusiones

. Pero pude seguir rodando durante la mañana y tarde hasta que ya no me quedaba goma en el flanco izquierdo.
Un día genial (pese al "revolcón), para recordar... y un organizador, como para repetir.