Si hay algo por lo que destacan las
Ducati es porque son bonitas desde todos los ángulos: por arriba, por un lateral, por abajo, por la parte frontal... y por supuesto, desde atrás. La que veis en la foto es la 1098 de nuestro compañero
Verivan rodando en
Jerez el año pasado.
¡Viva ese culito respingón!