 Por Alfonso Somoza @sukosomoza Google+ |
Después de innumerables problemas burocráticos y medioambientales, el Circuito de Velocidad de Tenerife tiene luz verde. El Consejo de Gobierno del Cabildo de Tenerife adjudicó ayer su construcción a la empresa Kiti Trans SLU por un importe de 30 millones de euros, un gasto privado que la empresa adjudicataria podrá recuperar a lo largo de los 35 años de explotación a los que se ha comprometido con el gobierno insular. La ejecución de las obras la llevará a cabo Axia SRL en un plazo máximo de 21 meses, de modo que tendremos que esperar hasta 2017 para ver finalizado este nuevo circuito de velocidad.
De los cerca de 30 millones de euros presupuestados, 21,4 millones se dedicarán a la construcción del circuito y de todas las instalaciones del paddock. 2,4 millones de euros se destinarán al acceso norte del mismo, mientras que la empresa concesionaria ya ha calculado que necesitará otros 240.000 euros para poder acometer las obras del acceso sur. El nuevo Centro Insular del Motor -su nombre oficial- estará ubicado dentro del término municipal de Granadilla de Abona, en el área conocida como Los Duques, con un total de 1,3 millones de metros cuadrados que son el resultado de la adquisición de varias fincas de la zona por parte del Cabildo de Tenerife.
En lo que respecta al trazado -con homologacía T1-FIA-, tendrá una sección principal de 4.067 metros con una recta de 819 metros, 10 curvas a la izquierda, 5 a la derecha y una anchura media de 12 metros que llega a los 15 metros en la recta principal y curvas contiguas. El sentido de giro será contrario a las agujas del reloj, y las primeras simulaciones hablan de un tiempo medio de 1 minuto y 20 segudos para un Fórmula 1, con una velocidad máxima de 310 km/h a final de recta. En total contará con nueve variantes distintas gracias a sus seis conexiones internas, lo que permite poder utilizar dos zonas del circuito independientes de forma simultánea.
La zona de paddock y edificios se extenderá a lo largo de 102.000 metros cuadrados, y contará con las estructuras de boxes (24 en total de 8x15 metros), centro médico, helipuerto, cafetería, zona de verificación, accesos y otros edificios auxiliares. La superficie destinada a los aparcamientos es de 104.000 metros cuadrados, con capacidad para responder ante una posible asistencia máxima de 30.000 espectadores para acontecimientos excepcionales, aunque las estimaciones hablan de una media de entre 4.000 y 10.000 espectadores por evento.
Habrá tres zonas de parking: una principal al oeste del paddock con capacidad para 1.050 coches y 60 autobuses, otro parking al norte del complejo para otros 1.200 vehículos y por último una zona de reserva con 400.000 metros cuadrados para situaciones excepcionales.
Si todo marcha según lo previsto, las obras de construcción del nuevo Centro Insular del Motor de Tenerife deberían arrancar el próximo mes de julio y finalizar antes del verano de 2017. En este vídeo puedes ver muchos detalles del proyecto y varias simulaciones:
