BOTT XR1R de BOTTPOWER

Por Borja Arias @borjarias | Google+

Pero antes de hablarte de su último trabajo, ¿qué es BOTTPOWER, o quién está detrás de dichas siglas? Su nombre es David Sánchez, un ingeniero experimentado y curtido en el mundo de la competición sobre dos ruedas, capaz de aplicar con maestría todos sus conocimientos para crear máquinas tan espectaculares como su XC1 Café Racer de la que ya dimos fe hace tiempo.

En esta ocasión, el resultado es una máquina que lleva fraguándose desde hace unos meses y cuyo objetivo era el de crear una evolución de la XR1 enfocada al uso exclusivo en circuito, empleándola como laboratorio de pruebas en el desarrollo de piezas y soluciones únicas para sus futuros proyectos.

Teniendo como punto de partida la XR1 aunque con algunos cambios, es prioritario conocer un poco el conjunto de la moto. Empezando por el motor, este deriva de una Buell XB, y para el carenado, incluido el depósito, se ha empleado la fibra de carbono como único material. La horquilla y la pinza de freno delantera de 8 pistones provienen de una Buell 1125. La bomba de freno delantera y manetas son Brembo, así como los botones de las piñas. También monta un display Motogadget, un manillar Easton, y el amortiguador es un Öhlins proveniente del kit de carreras de la Buell 1125.

Con estas ideas en la cabeza, David introdujo cambios elementales que pueden marcar un antes y un después en sus creaciones, un chasis de titanio y una electrónica de carreras, guardando el primero las mismas geometrías que la versión de calle XR1 hecho en acero, e introduciendo en el segundo una ECU EFI Euro4 que permite introducir control de tracción regulable, elegir entre tres mapas de motor diferentes, control de lanzamiento y un limitador de velocidad para pit lane en circuito.

Pero su nueva XR1R no solo se queda en esos cambios, también se ha equipado con telemetría para medir datos como el gas del acelerador, las revoluciones y la velocidad en ambas ruedas , o el trabajo de las suspensiones, así como medición GPS, temperaturas y niveles, o la presión del freno entre otros.

Pero sin duda, un punto donde se quieren centrar en BOTTPOWER a nivel de telemetría es en su nuevo chasis de titanio, queriendo medir cosas como los niveles de tensión en distintos puntos del chasis y en las rótulas transversales (tie rods) de anclaje del chasis, mediante extensometría, y comprender así como trabaja su nuevo chasis y poder compararlo con el de acero.

Otra de las nuevas soluciones que introduce la nueva XR1R es la ubicación de su radiador de aceite. Anteriormente estaba ubicado justo detrás del portanúmeros frontal, pasando a montarse en esta nueva versión justo delante del motor para una mejor refrigeración.

La XR1R al ser una moto creada y pensada para un uso exclusivo en circuito, se la ha despojado del motor de arranque, ahorrando al conjunto de la moto un total de casi ocho kilos respecto a la versión estándar, hecho que obliga a tener un arrancador externo para poder arrancar la moto al salir a pista.

Sin lugar a dudas la XR1 deja muy claras sus intenciones, buscando en su configuración de carreras estar por encima de los 150 CV de potencia y bajar de los 150 kilos de peso, cifras que la ponen como objetivo asaltar el crono el año que viene en la Pikes Peak International Hill Climb.

A continuación puedes ver su vídeo de presentación: